Cultivares,
espaciamientos y fechas de siembra
En la campaña 1998/99 se instaló en el predio del INTA Rafaela un ensayo en siembra directa de tres cultivares de soja. Los mismos fueron María 55
(grupo V), Camila 64 (grupo VI) y Mercedes 70 (grupo VII).
Cada cultivar se sembró en cuatro fechas (26 de octubre, 20 de noviembre, 17 de diciembre y 18 de enero) y fueron implantados a 35 cm y a 70 cm entre líneas.
El ensayo se instaló sobre un Argiudol típico, con una historia agrícola de 7
años, y el cultivo antecesor fue soja.
De acuerdo a datos relevados en la zona se destaca un déficit pluviométrico durante la primavera de 1998; en el verano siguiente las lluvias alcanzan y superan al promedio histórico, pero con una mala distribución que afectó mayormente a las sojas
tardías, debido a una escasez de lluvias durante la segunda quincena de febrero y comienzos del mes de marzo.
Si bien algunas fechas de siembra pueden considerarse de segunda, en todos los casos el cultivo antecesor fue soja por lo que durante el invierno y comienzo de la
primavera se mantuvo el lote libre de malezas con barbecho químico.
En cada fecha, previamente a la siembra, se realizó una pulverización con una mezcla de glifosato y 2,4-D (2,5 y 0,5
lt/ha, respectivamente) para controlar las malezas presentes. Estas eran, fundamentalmente: pasto cuaresma (Digitaria sanguinalis), gramillón (Eleusine indica),
verdolaga (Portulaca oleracea), yuyo colorado (Amaranthus quitensis) y quinoa
(Chenopodium album).
Posteriormente, en las siembras de octubre, noviembre y diciembre, se efectuaron dos aplicaciones de glifosato cada una y en la siembra de enero sólo fue
necesaria una pulverización con el mismo producto y dosis.
Junto con los herbicidas, se adicionó una dosis de 0,08 I/ha de
cipermetrina para controlar isocas defoliadoras; durante el llenado de vainas se controlaron las chinches presentes con 0,7
l/ha de endosulfan.
La cosecha se realizó mecánicamente en los cuatro surcos centrales y a lo largo de toda la parcela (56
m) para los distintos cultivares, fechas de siembra y
espaciamientos.
- Los tres cultivares ensayados tuvieron un buen comportamiento para las condiciones presentadas en la
campaña 1998/99.
- La mejor fecha de siembra para la variedad del grupo V (María 55) fue el mes de noviembre, logrando el más alto rendimiento del ensayo.
- El cultivar Camila 64 (grupo VI) demostró cierta estabilidad en los rendimientos para las fechas de octubre, noviembre y diciembre cayendo en la siembra de enero, como ocurrió con los demás participantes.
- El mayor rendimiento con la variedad Mercedes 70 (grupo VI) se logré en la siembra de octubre, cayendo levemente los rendimientos con el atraso de las épocas de implantación.
- En las condiciones de la campaña ensayada no se produjeron marcadas diferencias en los rendimientos con los distintos espaciamientos de siembra.
En la campaña 1999/00 se instaló un ensayo de similares características, pero en esta oportunidad los cultivares participantes fueron: María 55 (grupo V), Rosario 65
(grupo VI) y Virginia 572 (grupo VII).
Las fechas de siembra fueron 22 de octubre, 19 de noviembre, 15 de diciembre y 8 de enero. Los cultivos se
implantaron a 35 cm y 70 cm entre líneas, y las densidades utilizadas fueron de 23 y 30 semillas por metro lineal
para cada espaciamiento, respectivamente.
El ensayo se instaló sobre un Argiudol típico, con una corta historia agrícola (3 años) y el cultivo antecesor fue un maíz de segunda cosechado a fines
del mes de mayo.
Durante el invierno y comienzos de la primavera, se mantuvo el lote en barbecho químico con una mezcla de glifosato (2,0
l/ha) y metsulfuron metil (0,007 kg/ha). Esto permitió llegar a la primera fecha de siembra con una disponibilidad de 85
mm de agua, medidos hasta el metro de profundidad.
De acuerdo a datos pluviométricos de la zona, con excepción del mes de diciembre de 1999, las precipitaciones
fueron menores al promedio histórico durante todo el ciclo del cultivo. Las abundantes precipitaciones ocurridas en el mes de abril sólo beneficiaron a la producción de la última fecha de siembra (enero), lográndose
rendimientos satisfactorios.
Previamente a la siembra de cada época se efectuó un control de malezas con glifosato, y
posteriormente se realizaron dos tratamientos complementarios con el mismo producto en la primera fecha, y uno en la segunda y
tercera época de siembra. El control de isocas se hizo con cipermetrina y el de chinches con endosulfan.
La cosecha se efectuó mecánicamente sobre dos muestras de dos y cuatro surcos a 70 cm y 35 cm
respectivamente por 25 m de largo a 70 cm.
- Similar a lo ocurrido en la campaña 1998/99, los tres cultivares ensayados tuvieron un buen comportamiento para las condiciones presentadas en la
campaña 1999/00.
- La mejor época de siembra para las tres variedades participantes fue el mes de noviembre, reduciéndose su producción al adelantar y/o atrasar dicha fecha.
El mejor rendimiento para la siembra de octubre se logró con el cultivar Virginia 572 (grupo VII) y en la de
diciembre con la variedad María 55 (grupo V).
- En enero todos los participantes lograron un buen comportamiento a pesar de la fecha tardía de siembra, gracias a las abundantes precipitaciones ocurridas durante el llenado del grano (abril) y la fecha tardía de la primera he- lada, que no afectó el peso del grano.
No se produjeron diferencias apreciables en los rendimientos con los distintos espaciamientos de siembra.
Autores: Ings. Agrs. Oscar Keller y Hugo Fontanetto
INTA Rafaela
Fuente: Revista Agromercado
(Suplemento Soja) Año 2000
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